28 abril, 2023

El otro día me tocó un GIG con demora. 2 horas con los pasajeros arriba del avión. ¿Por qué los hicieron embarcar? Ahhh misterios de la vida.

Mi día empezó mucho antes. Tenía que estar en el aeropuerto a las 15:00, pero quería pasar por el fri yop, así que reservé el auto para las 13:30. Me habré levantado a eso de las 9, ponele. Dejé en orden mi casa, le cambié las piedras a los gatos, almorcé temprano y empecé a prepararme. Por suerte no demoro más de 30′, 40′ si tengo que atarme el pelo. El pibe que manejaba el remís es piloto privado y está juntando horas para la licencia comercial, así que prácticamente fuimos charlando de aviación todo el camino. Reniego un montón de mi trabajo, de los madrugones, de no tener tiempo para comer o comer tranquila, de vivir cansada. Pero me encanta la aviación comercial, los aviones, los aeropuertos y lo lindo que me queda el uniforme. Este trabajo es la droga que no sale en ningún test de orina.

Llego al aeropuerto, entro por la terminal nueva, que está hermosa. Paso por todos los lugares con cartel «Tripulación Solamente» (más droga). Amo esto. También lo detesto. No me soporto.

Apenas saliendo de Migraciones hay un free shop nuevo, así que el de la puerta 1 ahora está casi vacío. Me encanta conocer el lugar y tener toda esta mini data, todos esos tips con los que roban los tiktokers.

Me compro un café en el Starbucks y ahora sí: soy ese cliché que ves en el aeropuerto. La azafata diosa con su carry on en una mano, el café en la otra y el perfume recién comprado en la valija. De camino a mi puerta veo una valija negra, sola, ahí en el medio del piso. Lo pienso, pero no sé cómo se procede en esos casos y si me llega a agarrar la PSA de testigo (ni idea si es así) voy a llegar tarde. Lo siento, pero eso no puede pasar.

La tripulación de hoy es más que decente. Algun@ con ganas de ascender, pero se lo tolera lo más bien. Me toca back galley.

Ahora viene la parte que las pasajeras no ven cuando nos ven pasar todas reinas: la gente se pone bipolar con el asunto de la demora: de a ratos empatizan, de a ratos se enojan. Exigen café gratis, preguntan si tenemos para cargar el celular, nos putean porque van a perder su vuelo de conexión. Imaginen eso durante 2 horas, interrumpido por anuncios del comandante que tira información de a poco, que agrega 20 minutos de espera cada vez que habla. La función de la tripulación de cabina en estos casos es hacerse un poco la boluda, darle charla a los pax y en lo posible cambiar de tema para desviar la atención de la demora, dar vasos de agua, señalar la puerta del baño y fundamentalmente poner la carita.

Finalmente salimos. Obvio que manejamos perfil bajo todo el vuelo, no se cobró el cambio de asiento, los anuncios fueron pocos y solemnes. Sobrevivimos.